Durante las vacaciones recargaste las pilas, recobraste la energía y tomaste buenos propósitos para el inicio del año escolar. No es raro que este último represente un momento de estrés, ya sea a nivel personal o profesional.
La sofrología puede ayudarte a mantener lo positivo que traen tus vacaciones, porque te ayuda a establecer reflejos de relajación que te ayudarán a mantener un vínculo privilegiado con tu fuerza interior.
Recordando buenos recuerdos de vacaciones
El siguiente ejercicio estimula sus órganos sensoriales y le ayuda a recordar sus gratos recuerdos de vacaciones.
- Siéntate en una habitación tranquila sin solicitudes. (teléfono, portátil encendido…). Siéntese y tómese el tiempo para sentir los diferentes puntos de apoyo en su cuerpo.
- Recuerda tus vacaciones. Coloque las manos sobre los ojos, los párpados cerrados y concéntrese en una imagen específica recordándote tus vacaciones: el color del cielo, el agua del mar, los árboles de la montaña o del campo… Luego, pon las manos sobre las rodillas y empápate de estos colores.
- Ahora ponte las manos en la nariz y recuerda un olor a vacaciones. : la de algas en la playa, savia de pino, hierba recién cortada… Y vuelve a poner las manos en las rodillas mientras disfrutas del olor.
- Ahora pagatreve tus manos a tus labios. Recuerda un sabor agradable que disfrutaste este verano: el tomate recogido directamente en su pie y triturado levemente tibio por el sol, las moras saboreadas en la maleza… Luego, vuelve a poner las manos en las rodillas y saborea mentalmente este sabor.
- Ttermina tocando tu piel con las manos, buscando una sensación agradable : las olas rozando tus dedos, tus pies hundiéndose en la cálida arena, el sol calentando tu cuerpo…
- Disfruta de unos instantes de todas estas agradables sensaciones.
Haz este ejercicio todos los días. Por la mañana, te ayuda a despertar tu cuerpo y energizarlo. Por la noche, baja la presión porque reactiva la memoria sensorial, construida alrededor de sensaciones agradables.